Si se ha sufrido en algún momento un ataque de ansiedad o pánico, es casi seguro que la misma se vuelva a repetir en el futuro. Veamos como actuar cuando se presenten los síntomas.
Qué son las crisis de ansiedad:
Muchas personas que han sufrido ataques de pánico recurren a un profesional de la salud buscando causas orgánicas que dan origen a dicho problema, pero en realidad no pasa por ahí la cuestión.
Las crisis de ansiedad son un problema psicosomático que debe ser atendido por un terapeuta de dicha rama. Estas crisis son una repuesta psicosomática a complejas situaciones físicas, psicológicas y ambientales que se entrelazan entre sí.
No obstante, si tenemos plena conciencia de que sufrimos este problema, hay también algunas pautas que pueden ayudarnos en el momento de comenzar a sentir los primeros síntomas de ansiedad: malestar general, nauseas, mareos, sudoración, opresión en el pecho, dolor de estomago y palpitaciones, por nombrar algunos síntomas.
Cómo sobrellevar un ataque de ansiedad de manera menos angustiante
- Lo primero que debemos hacer para ayudarnos, es controlar la respiración, ya que a través del oxigeno que entra en nuestro cuerpo, las células podrán liberar los productos tóxicos que se acumularon durante este proceso.
- Si es posible, hay que buscar un lugar en donde podamos recostarnos o sentarnos de manera cómoda y tranquila, para llevar a cabo nuestra respiración.
- Si estas con algún amigo o persona de confianza, comentándole lo que te está sucediendo y pídele que te acompañe de manera tranquila, y si puedes y estas en condiciones, que te acompañe a dar una vuelta o paseo corto.
- Repite de manera mental que nada te va a suceder y recuerda que estas crisis no suelen durar más de 5 minutos.
- Cuando te sientas mas tranquilo, vuelve a observar el entorno para corroborar que no hay amenazas reales a simple vista, mientras, continua respirando lenta y suavemente.
- Luego de un ataque de ansiedad o pánico no retomes las actividades de manera inmediata, tomate unos minutos más antes de hacerlo. No te exijas.
- Como estos trastornos no comienzan de un momento a otro, antes de llegar a un punto demasiado crítico y que afecte el normal desarrollo en el ambiente en el que te desempeñes, es recomendable optar por hacer terapia, ejercicios, actividades que nos agraden, es decir, alternativas que nos permitan liberar todas nuestras tensiones y pensar en forma más positiva.
- Si notamos que a pesar de haberlo intentado por nuestros medios, no logramos controlar un ataque de ansiedad nosotros solos, es una excelente idea acudir a otras personas, como pueden ser amigos, familiares o profesionales.
- No es aconsejable tomar medicación por nuestros propios medios, si en verdad nos hace falta algún tipo de medicamento, el mismo debe ser recetado solo por un profesional idóneo.