Una de las facultades que más nos ha dado la vida, es el poder de elección. Las elecciones que realizamos, son el factor que más determina lo que seremos en la vida. En todo lo que hagamos en la vida, tenemos que tomar una elección siempre, así que dependiendo lo que elijas, nos hará ser quien somos y quienes seremos.
Todos hemos tomado y estamos tomando decisiones difíciles en nuestra vida, día a día. Muchas veces, cuando echamos la vista atrás, la mayoría de las veces nos gustaría coger la máquina del tiempo, y hacerlas de otra manera. Pero si cuando la tomaste, te das cuenta, que tomaste la mejor posible en esos momentos, no tiene porque uno arrepentirse, ya que fuiste fiel a ti mismo (a), que es lo más importante.
Tomar decisiones difíciles nos suelen suponer tres cosas:
1. Nos muestran quienes somos.
Creo que es más importante observar a las personas observando las elecciones que hacen, que sus habilidades, su currículum o cualquier otra habilidad que pudieran tener. Las elecciones revelan quienes somos en realidad.
2. Muchas decisiones que tomemos no son nada fáciles.
Siempre que estamos ante una decisión, estamos ante una encrucijada, ante un nuevo camino que no sabemos qué dirección tomar y más aún si la decisión que tenemos que tomar, no solo nos afecta a nosotros, sino a nuestra familia, personal al cargo o una cantidad de dinero importante que arriesgamos
3. Todas las elecciones nos cambian.
Cuando tomamos una elección, no podemos echarnos atrás, somos esclavos de nuestras elecciones y a las consecuencias de la misma y eso nos preocupa.
Pero como líderes de nuestras vidas, personal y profesionalmente, hay que tener en cuenta estos tres tipos de elección difíciles en estos tiempos:
1.- Las normas que me impongo siempre son más altas que las que los demás me imponen.
Tanto en la vida personal como en la profesional, hay mucha gente, que no se pone metas elevadas a sí mismo, que quieren hacer lo mínimo y sin ningún riesgo.
Pero las personas de éxito en todos los campos, se puede observar, que son personas que nunca están a gusto con sus niveles de rendimiento.
En cualquier ámbito de tu vida, si quieres conseguir lo mejor, la excelencia, es el resultado continuo del esfuerzo por mejorar, pero no hay que ser que los demás, sino ser la mejor persona que uno pueda.
2.- Ayudar a las personas es mejor que hacerlas felices.
Todos queremos agradar a la gente que tenemos a nuestro alrededor, caerles bien, pero muchas personas quieren lo que necesitan y necesitan lo que no quieren.
Uno de las facetas del liderazgo, principalmente profesionalmente, consiste en “causar” dolor a corto plazo y salir impune de ello. Si eres el líder de un grupo de personas, muchas veces, por no decirte la mayoría de las mismas, estén descontentos contigo. Pero, mejor será que estén descontentos contigo por cumplir tus responsabilidades que no por tus fracasos personales.
3.- Enfocarse siempre en el presente.
Aprovecha esta frase que tenían en una empresa que estuve y me sirve todos los días:” Ayer murió anoche”. Muchos de nosotros nos “revolvemos “al pensar en las oportunidades que hemos dejado pasar, sin parar de tener remordimientos, enfocando gran parte de su vida, en lo que pudo haber sido o lo que debió ser.
Lo único que puedes controlar en la vida, es el presente, lo que haces en el presente. ¿Qué ganas pensando todo el rato en cosas pasadas? Solamente perder las oportunidades que se te presenten en el presente. Las oportunidades se ven mejor cuando llegan y no son esperadas. Hay que estar atento a ellas, estar en el presente y no en los remordimientos del pasado. Vivir en el presente es vivir junto a nuestras fortalezas, lo que sucedió en el pasado, pasado es.
Portia Nelson, decía en un artículo titulado” Biografía en cinco capítulos“:
Capitulo 1: Camino por la calle. Hay un hoyo profundo en la acera. Caigo en el hoyo. Estoy en el hoyo. Estoy perdido. Desesperanzado. No es mi culpa. Me toma una eternidad hallar la salida.
Capitulo 2: Camino por la misma calle. Hay un hoyo profundo en la acera. Finjo no verlo. Vuelvo a caer en él. No puedo creer que me encuentre en el mismo lugar, pero no es mi culpa. Todavía me toma mucho tiempo hallar la salida.
Capitulo 3: Camino por la misma calle. Hay un hoyo profundo en la acera. Puedo verlo. Aun así caigo en el… ya es un habito. Tengo los ojos abiertos. Sé dónde estoy. Es mi culpa. Salgo de inmediato.
Capitulo 4: Camino por la misma calle. Hay un hoyo profundo en la acera. Camino rodeándolo.
Capitulo 5: Camino por otra calle.
¿Qué camino elegirías tú actualmente?
¿Cuáles son las elecciones importantes que cambiaron tu vida?
¿Estás preparado para hacer elecciones difíciles?